David Good, hijo del antropólogo Kenneth Good y la yanomami Yarima, luego de 20 años decide emprender una expedición para reencontrarse con su madre. Good no realizaba expediciones fuera del país desde su niñez, pero esta vez recorrió la selva amazonica en busca de la tribu semi-nomada Yanomami donde se había quedado su madre cuando el apenas tenía 6 años.
De pequeño, como todo niño, David no entendía el abandono de su madre. Usualmente, cuando le preguntaban por ella, este respondía que su madre había muerto en un accidente automovilístico.
"No quería que mis amigos supieran que mi madre era una mujer que anda por la selva desnuda y come tarántulas", explica David actualmente, y añade "No quería que supieran que soy mestizo. Y fue mi venganza, porque yo estaba enojado porque ella me había abandonado. Así que solo quería seguir contando la historia de que estaba muerta".
Fue a los 21 años que, por primera vez, decidió ver el documental de National Geographic sobre su familia, en el que había participado casi 15 años antes.
Cuando apareció su madre en la pantalla y la escuchó hablar, se quebró en llanto. Poco después leyó las memorias de su padre y se metió a explorar de lleno la cultura yanomami. Fue en ese momento que entendió porqué lo había abandonado su madre en aquel entonces.
A sus 25 años tomó la decisión de buscar a su madre en el Amazonas. David llegó al shapono mas su madre no estaba, fue Mukashe (su medio hermano al que acababa de conocer) quien se adentró en la selva a buscarla y ella al enterarse corrió todo el camino de regreso hasta la aldea donde se encontraba David. En el encuentro hubo muchas lagrimas por parte de todos, los sentimientos, los recuerdos de la niñez regresaron a la mente de David.
"Ahí me di cuenta: no me importaba lo que hubiera pasado, no me importaba la controversia antropológica ni lo que dijeran los críticos. No me importaba saber las razones que tuvo mi madre para irse. Yo solo quería tener un futuro con ella y su gente", afirma Good.
Pasó tres meses en el Amazonas. Pero iba y venía de la aldea de su madre y Yarima no entendía por qué estaba siempre viajando. David nunca intentó explicarle que estaba en proceso de crear una fundación sin fines de lucro y que estaba haciendo investigación en la zona.
Su organización, llamada The Good Project, busca ayudar a comunidades indígenas con medicamentos, ropa, comida y utensilios que les puedan facilitar la vida en la selva.
Para entender más acerca de la historia de David Good y su madre Yarima:
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